Este tipo de fotos siempre me encantan. Cuando voy acompañado a la montaña suelo desmarcarme en ocasiones de la línea lógica de progresión y me aparto unos metros. Resulta que las cosas se ven muy diferentes cuando cambiamos ligeramente de posición y eso es lo que me ocurrió en esta Loma de Peñamadura.
Aquel día Bernardo y yo habíamos amanecido en el espinazo de esta enorme Loma que separa las cuencas de los ríos Dílar y Dúrcal y nos pusimos en faena para acometer el Tozal del Cartujo con una Sierra cargada de nieve blanda y un cielo muy «sucio» de humedad. El resultado fue éste: la silueta de Bernardo que se recorta con fuerza sobre las laderas de la divisoria principal de Sierra Nevada que finaliza en el Caballo, cima que se aprecia perfectamente a la derecha de la imagen.

José Antonio Pastor González
Hago montañas desde que tengo uso de razón. Primero al lado de casa en mi Atalaya y en el Almorchón de Cieza. Después por las sierras de Segura y Cazorla que son mi segundo hogar. Finalmente, y por supuesto, también en Sierra Nevada y el resto de las cordilleras Béticas.
Todas ellas son el terreno de juego protagonista de esta web gracias a la cual disfruto por partida doble: primero subiendo las cumbres y luego relatando mi experiencia. Sed bienvenidos y gracias por vuestra visita.