Una de las imágenes que aparece en libro es la que veis aquí arriba. En ella, el sujeto celebra el regreso a la hierba verde en Urdukas, en el Himalaya del Karakorum, tras tres meses viviendo sobre los glaciares en un mundo helado y estéril. El mismo Galen comenta
…habíamos dejado Urdukas en mayo cuando aún se hallaba bajo un espesor de varios palmos de nieve. A la vuelta, encontramos un paraíso que superaba nuestras más locas esperanzas. Nuestro equipo estaba mojado a consecuencia de una tormenta y, mientras lo extendíamos para que se secara sobre el suelo firme y libre de nieve, observé que el rostro de Leif Patterson resplandecía de alegría…
Traigo aquí esta foto porque hace apenas mes y medio estuve en la Sagra acompañando a mis estudiantes de Matemáticas en lo que era su primera ascensión. Tras remontar toda la pendiente del embudo me dispuse a esperar a mis compañeros que venían con un poquito de retraso. Conforme les veía acercarse saqué la cámara y les daba ánimos porque soy consciente de que estos últimos metros son siempre los más duros. Entonces hice esta foto:

En el momento de ganar la divisoria uno de ellos — Ricardo — empezó a levantar los brazos como queriendo decir: ¡por fin se acaba este infierno! Lo cacé de casualidad porque fue un gesto muy rápido y apenas premeditado. Más tarde, revisando la tanda de fotos de ese día me di cuenta de que ese gesto espontáneo y universal me recordaba alguna imagen que ya conocía.
Salvando las distancias infinitas entre una y otra, la foto que tenía en la cabeza era la de Galen Rowell. Evidentemente, la Sagra no es el Himalaya, las lomas achaparradas de la Guillimona tampoco son las agujas de granito del Karakorum ni la pendiente del embudo es un infierno comparable a los tres meses de estancia en el universo gris y helado de las alturas, pero no he podido evitar traer aquí al blog esta impresión mía que no es la primera que me asalta en relación a las imágenes increíblemente hermosas de este magnífico maestro de la fotografía de montaña.

José Antonio Pastor González
Hago montañas desde que tengo uso de razón. Primero al lado de casa en mi Atalaya y en el Almorchón de Cieza. Después por las sierras de Segura y Cazorla que son mi segundo hogar. Finalmente, y por supuesto, también en Sierra Nevada y el resto de las cordilleras Béticas.
Todas ellas son el terreno de juego protagonista de esta web gracias a la cual disfruto por partida doble: primero subiendo las cumbres y luego relatando mi experiencia. Sed bienvenidos y gracias por vuestra visita.
Que fotazas!!!
La primera expresa la felicidad absoluta, que uno siente cuando sabe que está en lugar absolutamente privilegiado, rodeado de amigos, es como si dijera: ¡Que más se puede pedir!.
La segunda alivio de llegar a la meta, un «¡por fín dios mio!».
de cualquier manera la relacción entre ambas me parece genial.
Saludos, aprovechad estos días de nieve.
Gracias Bernardo… me alegro de que te gusten las fotos y sí que vamos a intentar aprovechar la nieve que parece que ha caído y mucha!!!
El caso es que me extrañaba un poco esta entrada en tu blog, pero ahora, al leerlo, me parece muy acertada.
En efecto José Antonio, lo que importa no son las montañas sino las sensaciones. También es cierto que cuanto mayor es el esfuerzo mayo lo es la recompensa.
Si Ricardo veía el cielo al llegar al collado (por cierto, mira que eres malo, podías haber subido por las Viboras que es más suave :wink_ee: ) con la Guillimona al fondo, Rowell tenía detrás la soberbia torre granítica del Lobsang Spire, que subieran por primera vez Scott, Child y Thexton en el 83 en una audaz escalada.
Un abrazo
Subimos por el embudo porque nos empeñamos nosotros jeje, que ya puestos a subir la Sagra no íbamos a hacerlo por el camino fácil.
Genial la entrada y genial la foto, me encanta. La Sagra es una montaña especial en muchos sentidos. Tuvimos la suerte de contar con un gran guía y disfrutamos mucho de la ascensión. La verdad que matemáticas + montaña es una combinación estupenda.
La foto refleja estupendamente lo justitos que algunos llegaron a la cima (también se ve detrás a Juanra cargando con dos mochilas, porque Alejandro no podía) y la alegría de alcanzarla. Fue duro, pero mereció la pena. Volveremos a por más.
Nos vemos en clase
Salu2!
Hombre Luis Carlos!!!
Yo también disfruté mucho ese día con vosotros y espero que tengamos muchas ocasiones más de compartir montaña, claro que sí 🙂
Nos vemos en clase :lol_ee:
lo que importa no son las montañas sino las sensaciones
Eso Félix, si lo dices tú que has subido a tantas y de tan distinto pelaje, tiene mucho valor 🙂 Y es que cualquier cerro esconde un tesoro :grin1_ee:
Gracias por el dato concreto sobre las torres de Lobsan Spire… de verdad que eres empollón tío
En cuanto a subir por el embudo, ellos querían sangre como te explican más arriba :tongue_wink_ee:
Recuerdo ese libro, y recuerdo ver las fotos con admiración hace bastantes años cuando empezaba a aventurarme en la alta montaña.
Teníamos el libro en el club universitario de «nautas y aventuras», que fue mui grupo de montaña y espelo hasta años después de acabar la carrera, nos lo regaló la editorial Desnivel despues por estar subscritos a la revista unos años.
Se ve que también lo habias ojeado bastante para recordarlo y poder hacer esa asociación de imágenes.
…y sigo sin haber subido a La Sagra,.. y por lo que leo cada vez va a resultar más dificil.
Ciertamente Luis, es un libro que no pasa desapercibido y que no se olvida :bigsurprise_ee:
y sigo sin haber subido a La Sagra,.. y por lo que leo cada vez va a resultar más dificil
Esperemos que no llegue la sangre al río y que la cosa se resuelva con sentido común :ohoh_ee:
Yo quiero un profesor como tú :clap_tb: :clap_tb:. Preciosa entrada, la verdad es que si que tienen mucho en común las dos fotos, al tiempo que son paradójicas, en la primera descienden de la cumbre y en la tuya llegan a ella. Para pensar.. sin duda.
Saludos ¡chito!
Yo quiero un profesor como tú
Eso tienes que preguntárselo a mis estudiantes, que aquí parece todo muy bonito
Un saludico paisana
Bonita fota y… bonitos recuerdos. Saludos desde el «Peñón del Toro».
Hombre Ángel, muy buenas!!!
Gracias por tu comentario y aprovecho para hacerte una consulta en abierto porque es un tema que a todos nos interesa…
Disparo: ¿qué sabes del tema de la valla en los Collados de la Sagra? Me han llegado oídas de que, además de cerrar el paso, hay un vigilante que amenaza con denunciar si nos adentramos en la Sagra por el camino normal :ohh_ee:
A ver si nos puedes contar algo Ángel.
Muchas gracias de antemano
Hola Luiso. Siempre un placer.
La verdad es que no tenía ni idea del tema, así que nada os puedo ayudar.
Pero pienso que ya va siendo hora de organizar un poco las ascensiones a La Sagra, y no tomarla más como si fuese el jardín de nuestra casa.
Cuando mi padre era pastor en su cumbre, no existían veredas por todos sus put… lados.
Y creo que ya está bien de erosionar ese cerro con dueño, por donde a cada uno se nos antoje (yo el primero).
¿Crees acaso que el día del buzón le hicimos algún beneficio a aquel paraje, tirándonos 50 personas por la pedrera?
Quizás va siendo hora de tomar conciencia todos los que «nos creemos defensores de la naturaleza»,y empecemos a plantearnos hacer una visita a la cima de modo UNIVERSAL en vez de hacer tantas excursiones por donde a cada uno se nos antoje.
Así quizás, demostraríamos que sólo queremos visitar una cumbre emblemática, en vez de ir cada vez a demostrar lo «machotes» que somos, haciendo la «pingüino», el «embudo», «el monte vertical», «la canal de los carneros»… y así sucesivamente.
Y si no, vayámonos a visitar cumbres a los Pirineos, a ver si están tan hechas mierda como lo está La Sagra…
No sé… Ahí dejo eso…
Bueno, tu planteamiento me parece radical Ángel :ohoh_ee: porque pienso que, precisamente, subiendo por distintos sitios, es cuando menos daño se le hace a la montaña. El problema es concentrar los itinerarios en una zona :mad1_ee:
Antes todo el mundo bajaba por la pedriza y ahora está como está :furious_tb: Lo suyo es conocer que hay varias bajadas alternativas e ir repartiendo la carga sobre la montaña para que no esté descompensada… y con los itinerarios de ascenso pues lo mismo 🙂
Es sólo mi opinión
—Gracias por esta nueva entrada, pues aunque no todo van a ser travesias y rutas, aqui has plasmado muy bien eso que llevamos todos dentro y que cuando conseguimos superar una de esas pruebas no podemos por menos de dar rienda suelta.
—Unas fotos y unos comentarios para meditar y que dan mucho que pensar…
—Un abrazo, y a ver si la climatologia acompaña y nos vemos pronto…
Seguro que sí Ángel.
Un abrazo
Coincido con todos en que el escenario no es el mismo, pero la sensación de satisfacción al ver que lo que te está consumiendo se acaba, es inconmensurable, es orgásmico.
Interesante combinación: profesor de mates y guía de montaña, así me hubiera gustado a mi. Loable actitud, si señor !!!!!!! :thumbup_tb:
A ver si algún día arreglo mi pie «made in china» y hacemos una mañana de ramblas por la cara sur de Ricote o por donde se tercie.
Un saludo, Luiso.
Interesante combinación: profesor de mates y guía de montaña
Lo primero que nombras es la profesión… lo segundo la devoción :lol_ee:
A ver si algún día arreglo mi pie “made in china” y hacemos una mañana de ramblas por la cara sur de Ricote o por donde se tercie.
Me gusta ese plan Luis. Me apunto fijo
Seguro que si le preguntan a tus alumnos ¿Con quién has ido a la montaña?, van a contestar: – Con mi profesor de matemáticas. Eso es así, es tu etiqueta y es lo primero que te ven ellos.
Descuida que llamaré a tu buzón de entrada para ir a fotografiar y pasear por un rincón muy cercano a Ricote que me lleva de cabeza.
Un abrazo.
buenas impresiones sobre esa imagen de sufrimiento en el momento en que uno acaba algo y la sensacion de haber conseguido algo tan esperado , ya da igual subir la sagra , llegar al muhacen desde trevelez o simplemente terminar el dia junto a un rio en una travesia de 30km. 🙂 ese libro lo buscare a ver si aun quedan por ahy, un saludo
Toda la razón Diego… lo importante es la sensación que nos queda después de haberlo dado todo y eso es muy frecuente en la montaña
Por cierto …voy a buscar el libro ,reune todas mis pasiones
gracias…..
Espero que todavía queden ejemplares. Es buenísimo
Vaya ,Jose Antonio me has dado en el clavo…..llevo mucho tiempo ,soñando con hacer un trekking por el Nepal ,no sueño con subir al techo del mundo ….me conformaria con contemplarlo mas abajo…no tengo condiciones para subir a esas immensas montañas, pero poder ver parte de ellas ,sería una experiéncia mágica….
Me conformaré con la Sagra jejejejeje…un saludo
Bueno Elena, la Sagra en un día como el de hoy en el que le estará cayendo un buen paquete de nieve tiene un ambientazo que no tiene que envidiar a otras montañas mucho más altas :shuteye_ee:
Con respecto a lo del trekking ya estás tardando. Sólo necesitas unas vacaciones y ahorrar un pelín, pero sólo un pelín :wink_ee: que tampoco es tan caro. Lo disfrurás muuuuuuuuucho
Librería Desnivel un lugar de referencia junto a la Tienda Verde.
También conservo algunos libros de montaña de mis tiempos jóvenes. Fueron los que me hicieron soñar con sitios lejanos.
Pero volviendo al tema, la imagen que nos muestras salvando la distancia no tiene, menos valor que la de Galen Rowell. Para tus alumnos subir hasta la cima de la Sagra, supuso un gran esfuerzo, pero obtuvo su recompensa como en el ejemplo anterior. Y la sensación de éxito posiblemente fue en la misma proporción.
Un saludo, José.
¿Qué sitios más guapos esos dos que nombras verdad Paco? Es la ventaja de vivir en Madrid :wink_ee:
Yo también conservo como oro en paño los libros de montaña que voy comprando… bueno, los que realmente me aportan algo… que son la mayoría
Con respecto a mis alumnos, estoy contigo. Para ellos fue un gran día subir su primera Sagra y estoy convencido de que harán muchas más… tengo suerte… son buenos alumnos y encima les gusta el monte… ¿qué más puedo pedir? :grin1_ee: